Giro de guión en las últimas horas, culminado en los apenas tres días que lleva Flavio Briatore de nuevo en la F1 al frente, como asesor y fichador, de Alpine: Carlos Sainz está en su lista de deseos para sustituir a Esteban Ocon.

Williams y Audi no están solos en su deseo de llevarse el gato al agua con el 55 de Ferrari, que ha visto como el fuerte interés de última hora de Flavio, anunciado el pasado viernes, y de Luca de Meo, CEO de la firma gala y muy ilusionado con el fichaje del español, ha metido una nueva variante en la ecuación del futuro del español, que quiere tomar ya una decisión inminente.

Alpine, que arrancó la temporada lejos de la cabeza y como el peor equipo, ha enderezado el rumbo pese a la guerra interna y en Montmeló puntuaron ya los dos coches, superando incluso a Aston Martin.

Se vio en el paddock este domingo a Flavio con Sainz padre, charlando en lo que parecían encuentros informales también con De Meo (con quien entró al hospitality galo a primera hora de la mañana, cuando menos gente hay en el circuito), pero que podrían terminar con el 55 compartiendo equipo con Pierre Gasly, que sigue sin contrato renovado. Si llegan demasiado tarde lo sabremos en cuestión de horas.

Además ya conocen a Carlos, que compitió media temporada con ellos junto a Hulkenberg antes de saltar a Ferrari. Alpine, en 2026 podría abandonar el motor Renault, que ahora mismo no es el mejor de la parrilla, y heredar el Mercedes que dejará libre Aston Martin, que llevará a su vez el Honda que se marcha de Red Bull.

Está por ver si Alpine incluye alguna cláusula de salida para que Carlos pueda abandonar si aparece alguna opción en Red Bull, por agotamiento de Verstappen o Checo, como también ofrecería Williams.