Épico triunfo de Muguruza que derriba a Kerber, la número 1
En un partido antológico, Garbiñe Muguruza ha derribado a la número uno del mundo, Angelique Kerber (4-6, 6-4 y 6-4 en dos horas y 20 minutos), y se ha clasificado para los cuartos de final de Wimbledon. La apertura del frenético Manic Monday (Lunes Loco) no pudo ser mejor para los espectadores, con un duelo de altísimo nivel que se llevó la española porque su valentía y su juego de ataque (55 golpes ganadores, 35 de ellos en sus 54 subidas a la red) se impuso a la rocosa defensa de la alemana, quien en su mejor versión en mucho tiempo apenas se acercó al centro de la pista (5/7). Pierde el número uno mundial, que pasa a manos, de momento, de Karolina Pliskova, aunque Simona Halep podría arrebatárselo.
Muguruza se enfrentará ahora a la rusa Svetlana Kuznetsova, que venció a la polaca Agnieszka Radwanska por 6-2 y 6-4. Es la tercera vez que gana a una líder del ránking. Ya lo hizo dos veces contra Serena Williams en Roland Garros 2014 y 2016. Por cómo se ha producido, esta victoria puede dar alas a la española.
Garbiñe llevó siempre la iniciativa, pero la réplica de Kerber fue impecable y Garbiñe falló más de la cuenta en la red. Tuvo que hacerlo para poder hacer frente a la precisión de su rival (acabó con 50 errores no forzados cuando hasta este lunes solo acumulaba 30 en tres partidos). La alemana la pasó una y otra vez en sus subidas durante el primer set y gran parte del segundo. Con nervios de acero y un break en el noveno juego, el parcial inicial cayó del lado de la ya exnúmero uno.
Muguruza necesitaba reaccionar y asumir más riesgos, pero en la continuación afinó con las voleas y se agigantó para evitar los passings de Kerber, que pudo volver a romper el servicio de la española en dos ocasiones. Pero aflojó su precisión y con tres o cuatro fallos permitió que se llegara a una tercera y definitiva manga.
Un último set memorable
Aguardaba lo más emocionante. Con las dos tenistas cansadas por los largos intercambios y el calor, el juego, sin embargo, no empeoró y llegó una eléctrica sucesión de alternativas. Kerber empezó mandando, con un break de salida. Garbiñe recogió el guante y sin descomponerse igualó las cosas en el cuarto juego, pero a continuación volvió a perder su saque. No tardó en recuperarlo y ponerse por delante levantando cuatro bolas de rotura en un juego memorable que duró más de diez minutos (4-3). Tras una pequeña tregua, Muguruza puso la victoria a tiro de uno, apretó, doblegó la férrea resistencia de su contrincante y a la tercera ocasión que tuvo se llevó el triunfo, el quinto consecutivo ante la teutona, que cede su corona de líder mundial.