La Masia vale 193 millones más que hace un año
Que ha sido el año de La Masia ha saltado la vista en el césped y en la dimensión social que han alcanzado futbolistas como Lamine Yamal que llenan las calles de España de camisetas. Pero, por supuesto, también ha supuesto el despegue económico de los canteranos del Barça como joyas de mercado. Los que estaban, los que han aparecido de manera insospechada como Gerard Martín, Marc Bernal o Fort; y los que se fueron y han vuelto, como Dani Olmo.
Admitiendo la valoración de la web especializada Transfermarkt, los 17 canteranos que tiene este año en su plantilla el Barça, o siendo del filial ya han debutado con la misma, han aumentado de manera conjunto su valor en 193,2 millones de euros. Una tasación que confirma a La Masia como una de las mejores fábricas de producción de jugadores del mundo, adornada además por un concepto único de la enseñanza que ya fue mundialmente reconocido hace década y media con aquella foto memorable de Xavi, Iniesta y Messi, tres productos genuinos de la pedrera azulgrana, copando el Balón de Oro del año 2010, con el argentino por delante del manchego y el egarense.
El éxito se repite ahora con futbolistas como Lamine Yamal. El jugador criado en Rocafonda, que el año pasado estaba tasado en 60 millones de euros (una barbaridad ya para un chico de 16 años), ha subido su valoración a los 150 millones. Las otras dos explosiones son Pau Cubarsí y Fermín López. El central estaba tasado en 1,50 millones en diciembre de 2023. Su debut con el primer equipo se produjo en el mes de enero. Jugó medio tiempo en el partido de Copa ante el Unionistas en Salamanca; y luego debutó en la Liga contra el Betis para instalarse de manera definitiva en la primera plantilla. Ahora vale 40 millones de euros.
Otro subidón monumental en 2024 lleva el nombre de Fermín López. El andaluz, un descubrimiento puro de Xavi, que se lo llevó a la pretemporada de Estados Unidos en el verano de 2023 cuando era un desconocido que había escapado del Barça Atlètic hacia su tierra, Andalucía, para hacer la mili futbolística en Linares, ya era un jugador bien reconocido la Navidad pasada (15 millones de valoración). Un año después, y gracias entre otras cosas a su deslumbrante actuación en los Juegos Olímpicos de París, donde dejó varios partidos inolvidables, entre ellos la final del Parque de los Príncipes contra Francia, ya está en los 50 millones de euros de tasación. Las dos apariciones del verano han sido Marc Bernal y Casadó. El primero tuvo la desgracia de lesionarse en Vallecas en la tercera jornada de Liga. Pero ha subido su tasación cuatro millones desde diciembre del año pasado. Casadó, un futbolista que parecía condenado a salir y estuvo a punto de irse al Granada hace poco más de un año, terminó renovando y se ha asentado por sorpresa en el once de Hansi Flick, al punto de aterrizar también en la Selección. Su valor ha pasado de 600.000 euros a los 15 actuales.
Hay crecimientos más modestos, pero crecimientos al fin y al cabo. Héctor Fort, promesa de buen lateral con talento ofensivo y capaz de jugar por las dos bandas, ha subido nueve millones de euros su tasación en un año (de uno a nueve ‘kilos’) Iñaki Peña ha doblado su tasación; ha pasado de los cuatro a los ocho millones gracias a actuaciones convincentes después de la lesión de Ter Stegen. Gerard Martín ya vale tres millones, un brutal ascenso si se atiende a que valía 300.000 euros hace solo un año. La buena temporada de Eric Garcia en Girona permitió que creciese de los 15 a los 20 millones; y Pau Víctor ha pasado de los 800.000 euros a los cinco millones
Pese a las lesiones, estrellas como Ronald Araújo (70) y Gavi (90) han podido mantener su altísima tasación. Las únicas caídas de mercado han sido las de Ansu Fati quien, castigado por sus múltiples lesiones, ha bajado 15 millones su valor (de 30 millones ha bajado a 15). Balde, algo irregular también, ha frenado en parte la progresión meteórica de su valor de mercado: ha bajado mínimamente de 50 a 40 millones. Dos chicos de Mendes aún insultantemente jóvenes que pronto pueden recuperar su valor.