Luis Rodolfo Machado: "Armamos tremendo equipo para ir a México"
Caracas - Denis Phipps, Omar Bencomo Jr., Raúl y Carlos Rivero, Hassan Pena, Gregory Infante y Luis Ramírez son los peloteros que se unirán a las Águilas del Zulia para la Serie del Caribe 2017, a desarrollarse en Culiacán (México) entre el 1 y 7 de febrero de este año.
"Sentimos que armamos tremendo equipo para ir a México", expresó el presidente Luis Rodolfo Machado a El Universal. "Sólo falta definir si contaremos con otros jugadores, entre ellos, René Reyes, Niuman Romero y Alexi Amarista. Este último está esperando el permiso de los Rockies de Colorado".
Según el directivo, la decisión de convocar a estos peloteros se produjo luego de que la organización descartara a Mario Lisson, Endy Chávez, José Tábata, Jordany Valdespín, José Pirela y Silvino Bracho.
"Algunos de ellos tienen ciertos compromisos, prefieren descansar porque sienten agotamiento físico y otros por otras razones. Pero a todos se les respeta la decisión y se les agradece bastante por haber contribuido en la obtención de nuestro sexto campeonato", indicó Machado antes de dirigirse a la Basílica de Nuestra Señora de la Chiquinquirá, a donde llegó en compañía de peloteros, dirigentes y otros directivos de la novena para agradecer a La Chinita por el éxito alcanzado en la contienda.
Los rapaces asistirán por sexta ocasión al evento de clubes organizado por la Confederación de Beisbol Profesional del Caribe, luego de vencer a los Cardenales en cinco juegos en la final de la campaña 2016-2017 de la LVBP, la cual se disputó en honor a la memoria de doña Lilia Silva de Machado, madre del actual mandamás de las Águilas.
¿Qué les permitió a los zulianos adueñarse de uno de los cinco boletos a la Serie del Caribe? El compromiso asumido por los peloteros, cuerpo técnico y alto mando del club para volver a la competitividad luego de haber sido uno de los dos conjuntos eliminados en la ronda eliminatoria de la campaña 2015-2016.
"Este camino se inició en diciembre del año antepasado", confesó orgulloso el manager Lipso Nava. "Una vez se oficializó mi nombre para llevar las riendas, la directiva y yo trabajamos con mucha planificación. Ellos valoraron y aceptaron mis propuestas de cambios, incluyendo la reestructuración del equipo", aseguró.
"No fue fácil para todos los técnicos cargar con el peso de la fanaticada, por la sed de éxitos que tenían", expresó el dirigente. "Pero pudimos jugar bien en la temporada regular, pasar los escollos de los Tigres de Aragua (en los playoffs), los Caribes de Anzoátegui (en la semifinal) y ahora los de Cardenales, quienes fueron un rival muy fuerte".
La novena zuliana saltó al terreno desde el primer día de la contienda, el 6 de octubre, con la misión de romper la sequía de 17 años sin alzar la copa de campeones. Este objetivo le permitió desde imponerse en los primeros cinco cotejos de la zafra hasta mantenerse en el primer lugar de la tabla, el cual fue tomado por los Cardenales el 30 de noviembre y no fue devuelto en lo que restó de torneo.
Una vez en la postemporada, la tropa dirigida por Nava se impuso con autoridad en la fase de playoffs y semifinal ante Tigres y Caribes, respectivamente, con registro de 8-1. Posteriormente, elevaron la marca a 12-2 gracias a cuatro triunfos y un revés en la final frente a Lara.
La zulianidad dio frutos
Contar con expeloteros en el staff de coaches de las Águilas del Zulia fue una de las claves que, según el presidente Luis Rodolfo Machado, influyó en la obtención del sexto título para la franquicia, pues ello fue capaz de generar la camaradería y el sentimiento necesario que permitió ir en búsqueda del objetivo planteado.
"Debíamos armar un cuerpo técnico que verdaderamente amara la camiseta. Esa fue la razón de por qué todos los miembros, excepto Jon Nunnally (coach de bateo), fueron elegidos", explicó el directivo.
Los rapaces tuvieron entre sus dirigentes, además de Nava, a los emblemáticos Wilson Álvarez (coach de pitcheo), Lino Connell (coach de banca) y Álex Delgado (coach de primera base).
"Cada uno de ellos logró poner en práctica lo que desde el primer día de entrenamiento se dijo: que jugarían solo aquellos peloteros que salieran a competir y a entregarlo todo. Afortunadamente, se hizo el trabajo". agradeció Machado.