El Barça vuelve a estar donde le corresponde en Europa y dando un golpe de autoridad en Liga, tras recuperar la segunda plaza con una victoria de muchísima autoridad en el Metropolitano. En una semana inmejorable, el equipo de Xavi ganó con solvencia al Nápoles y exhibió pegada ante el Atlético. Lo hizo con Cubarsí completando dos partidos casi perfectos, con Fermín marcando en los dos encuentros y con la participación decisiva de Lamine, en Champions, y de Héctor Fort, en Liga, entre otros.
La reconstrucción del equipo azulgrana, como analizó Xavi Hernández hace unas semanas, marcha. El técnico catalán presentó un once, condicionado por la plaga de bajas, con una media de edad de 25,9 años en Europa. Dos menores de edad -Cubarsí y Lamine- y sólo tres futbolistas por encima de la treintena -Ter Stegen, Gündogan y Lewandowski- para presenciar el comienzo de lo que son los primeros trazos del Barça del futuro. En Liga, la baja de Cancelo permitió la entrada de Héctor Fort, otro producto de La Masía. Ha llegado una nueva era, parafraseando a Ronald Araujo tras la final de aquella Supercopa, en el club catalán.
El propio Xavi cree que algunos de estos futbolistas pueden marcar una época en el club azulgrana. Así respondió este viernes preguntado por Lamine y Cubarsí: "Deben seguir este nivel. El Barça es el escalón más grande en el mundo del fútbol. El reto es mantenerse muchos años en la élite del fútbol. Pero tienen todo, mentalidad, condiciones y capacidad, para hacerlo. Pueden marcar una época en el club y en el fútbol mundial"
En el once tipo del Barça de esta temporada faltan por lesión, además, Balde en el lateral izquierdo (20 años), Pedri y Gavi en mediocampo (21 y 19). La renovación 'low cost' de Laporta ha recuperado la apuesta decidida por La Masía. Recurrir a la cantera en tiempos de crisis se ha convertido en la mejor solución para los azulgrana. Cuatro canteranos jugaron de inicio en esa final ante el Nápoles y otros dos más veteranos como son Oriol Romeu y Sergi Roberto entraron ya en la segunda mitad. Cinco jugaro de inicio ante el Atlético y otros tres, incluido Casadó, aparecieron en la segunda mitad. Todo esto va a llevar, casi con total seguridad, a ver en el Barça de la próxima etapa un 'baby boom' que le convierte en una de las plantillas más jóvenes entre los equipos punteros de Europa.
La incógnita de Ansu
Dejando a un lado la incógnita de futuros fichajes, ateniéndose a la evolución natural de la plantilla por edad y rendimiento, un once no muy lejano del Barça sería el formado por Ter Stegen en portería, Koundé, Cubarsí, Araujo y Balde en defensa, Frenkie de Jong, Fermín y Gavi en mediocampo y un tridente formado por Pedri, Lamine Yamal y Vitor Roque. Anticipando, eso sí, que jugadores clave a día de hoy como Gündogan o Lewandowski no estarán o pasarán a un segundo plano. La aparición de otros jóvenes canteranos como Iñaki Peña y Héctor Fort esta temporada o el regreso de Eric García y Ansu Fati, cedidos en el Girona y el Brighton respectivamente acrecentarían esa sensación de producto nacional y juventud en una plantilla que no está preparada para grandes incorporaciones. No al menos en cuanto a número.
Tres objetivos en uno
El Barcelona recuperaría, en primer término, su identidad. Sanearía las cuentas, en segundo, y volvería a marca con el sello de La Masía un equipo con hambre de títulos, en tercero. La incógnita es si se tendrá la paciencia suficiente con un equipo que, en palabras de Xavi, ya compite con los mejores en Europa. De momento forma parte de los ocho mejores y aspira a ser una de las revelaciones de esta Champions League. El Barcelona del futuro es ya una realidad en el presente.