Vettel contiene la hemorragia de Ferrari

Sebastian Vettel ha completado en Sepang un gran premio tan accidentado y poliédrico que el piloto no sabía si acabar feliz por la gran remontada (de 20º a 4º) y ser nombrado piloto del día por los fans, esperanzado por seguir en la pelea, triste por no pisar el podio, nervioso por sus duelos con Alonso o agobiado por el choque final con Stroll que le puede costar una sanción.

El alemán tenía que contestar mil preguntas distintas al terminar la carrera tras los múltiples golpes que ha ido encajando para terminar más lejos, a 34 puntos de Hamilton con apenas 125 en juego en las últimas cinco carreras que restan. Pero sin ayuda de Raikkonen, que no le pudo restar puntos al líder al no poder siquiera salir, y gracias a la aparición estelar de Verstappen, al final Vettel contuvo la hemorragia de puntos, malas decisiones e infortunio de Ferrari en los últimos 15 días. Nadie quería coger el teléfono al terminar la carrera ante la llamada del presidente Marchionne y el hospitality era un funeral.

Salió último, y aprovechó para cambiar ya ICE, turbo y MGU-H: más sanciones pero igual plaza en la salida, lo que le vale para futuras carreras. Arrancó con estrategia distinta, neumáticos blandos y la primera parte de carrera fue la esperada al tener el mejor ritmo de todos: antes de llegar a la primera parada ya rozaba el podio. De hecho el único que le opuso cierta resistencia fue Fernando Alonso, al que tardó en pasar varios giros.

Al regreso, superando a Bottas tras la parada en el giro 27 y calzado con superblandas, fue al ataque a por Ricciardo y esa tercera plaza del podio, lo que hubiera sido un milagro. "Estaba apretando al máximo para alcanzar a Ricciardo. Pero solo he podido luchar un poco con él hasta que los neumáticos se agotaron. Después quedaban dos o tres vueltas y no tenía sentido seguir atacando", reconoció tras fundir sus gomas.

Poco antes perdió la conexión con el australiano, a su entender debido a que Alonso se hizo el remolón al ser doblado durante un par de curvas. "Vamos Alonso... pensaba que eras mejor que esto", dijo en la radio para que lo oyeran millones de personas. "Él ve las banderas azules y también ve a los coches que vienen, pero ha decidido ayudar a Ricciardo un poco", manifestó con una evidente carga de mala leche hacia el español tras acabar la carrera. "Dijo al irse de Ferrari que era un fan más pero hoy no actuó como tal".

Que tampoco fue un final normal, ya que en lo que regresaba a boxes llegó el topetazo con Lance Stroll. Uno se abrió, el otro se cerró y el golpe fue de campeonato. Incomprensible: "Yo estaba recogiendo goma y él pretendía hacer lo mismo en el lugar por el que estaba pasando yo. La próxima vez tendrá que mirar mejor", dijo Vettel, que tenía para todos y que regresó a boxes subido a lomos del Sauber de Wehrlein.

El caso es que el Ferrari quedó destrozado y si la Scuderia se ve obligada a cambiar la caja de cambios para Japón (la han enviado a Maranello para ser estudiada minuciosamente), Vettel perderá otros cinco puestos en parrilla, lo que sería otra grieta en la herida para los de la Maranello, que no salían de su asombro ni al final ni al principio con Raikkonen, hundido por otra inesperada ración de problemas en el propulsor.

"No hemos tenido un problema de motor en todo el año y ahora todos nos han llegado de repente", reconocía Marc Gené al acabar la carrera en Movistar. "Me decía alguien del equipo que si hoy caía un meteorito en La Tierra, nos caía a nosotros... Hemos regalado dos dobletes y es muy duro de aceptar no lograr ni siquiera un podio en ninguna con el mejor coche. Hoy hubiera ganado Kimi si no se estropea el motor".

« Katinka Hosszu venció a Sarah Sjostrom en la prueba de la Copa del Mundo - José Altuve obtiene corona de bateo en triunfo de Astros »

Ingresar al Sistema

¿Ha olvidado sus datos?
Bienvenido:

Consultar Ticket
Logros
Resultados
Calculadora