Alcaraz se venga de Monfils para meterse en cuartos de Shanghái
uele decirse que la venganza es un plato que se sirve frío. Aunque en el caso de la consumada por Carlos Alcaraz ante Gael Monfils puede decirse que estaba templado. Porque no hace tanto que el francés ganó al español en uno de los partidos más amargos del español en lo que va de año, aquel de Cincinnati en el que el número dos del mundo acabó tan irritado que hasta rompió una raqueta. Este miércoles, en Shanghái, las cosas fueron muy diferentes, porque Alcaraz no se despistó en ningún momento y venció en dos sets (6-4 y 7-5) y 87 minutos.
El jueves (no antes de las 12:30, Movistar +) Carlos se enfrentará Tomas Machac (23 años y 33º), que remontó para vencer por 3-6, 6-4 y 6-3 al estadounidense Tommy Paul. No hace mucho, en la fase de grupos de la Copa Davis, ganó al checo por 6-7 (3), 6-1 y retirada, lo que augura cita complicada en unos cuartos de final que alcanza por primera vez en el torneo. De hecho, es el primer español que llega allí tan lejos desde que lo hicieran Rafa Nadal y Albert Ramos en 2017. Ahora ya puede decir que ha pisado esa ronda en todos los Masters 1.000 y Grand Slams que se disputan sobre pista dura. “Sé que ahora Tomas está jugando muy bien. Tiene un gran tenis. Él es muy, muy rápido también, así que tengo que estar concentrado en eso”, señaló el de El Palmar sobre su próximo rival, que no se arruga ante semejante reto. “Nunca se sabe, pero creo que mis posibilidades están ahí. Él también es rápido, así que será divertido vernos en la pista. No pude terminar aquel partido, pero fue de un gran tenis, así que espero que también lo sea este”.
“Lo que he intentado es estar calmado, controlar mis emociones y esperar mis oportunidades. En el segundo set tuvo algunas de romperle el set al principio, y no las aproveché, pero traté de seguir tranquilo, porque sabía que tendría más. Tenía que intentar estar lo más calmado posible durante el partido, porque sabía que eso me ayudaría mucho”, dijo Alcaraz cuando le preguntaron en la pista sobre aquel duelo del pasado mes de agosto. “Estoy sintiendo la bola realmente muy bien, mucho mejor que en la gira norteamericana. Así que estoy feliz de haberlo hecho otra vez y espero que sigua así”, añadió el murciano de 21 años, que no se dejó enredar por el parisino de 38, que había dicho el martes que Carlos le iba a machacar.
Monfils plantó cara
No fue así, porque el saque y la potencia de golpeo ayudaron mucho durante todo el encuentro a Monfils, que tuvo incluso una opción de rotura en la primera manga, para ponerse con 4-3 y servicio. Desde ahí, solo ganó un juego en ese parcial, pero en el segundo, acortando los puntos con un tenis más directo, aguantó hasta el definitivo 7-5, mientras Alcaraz tiraba de paciencia y hacía lo que tenía que hacer, todo bien. Estaba fresco, por esos dos días de descanso seguidos, improvisados por la lluvia que entorpeció las jornadas del domingo y del lunes.
“Honestamente, creo que era demasiado para mí, porque me sentía bien físicamente después del anterior partido y me apetecía volver a la pista, y estar dos días sin competir se me hizo largo. Tenía muchas ganas de jugar hoy. Traté de descansar, porque es verdad que he jugado mucho últimamente, entrenarme un poco y estar tranquilo para llegar en forma para el partido de hoy”, admitió el de El Palmar, que está en racha de 12 triunfos, la mejor suya en 2024 y tercera más larga del año en el circuito, podría cruzarse con Jannik Sinner en las semifinales del sábado. “Lo tengo en mente siempre, porque quiero llegar lejos en los torneos, y eso significa enfrentarse a los mejores del mundo en esas rondas. Llegar a las semifinales es un objetivo para mí, para él también, y está jugando antes que yo, a un gran nivel, así que ver un gran partido antes que el mío me ayuda a salir a la pista y dar un buen espectáculo. Veremos si mañana (jueves) pasa igual, pero estoy feliz de que estemos ahí los dos”. Pasará, porque el italiano, después de vencer en octavos a Ben Shelton (6-4 y 7-6 (1)), se las verá no antes de las 09:00 con Daniil Medvedev, triunfador en el duelo contra Stefanos Tsitsipas (7-6 (3) y 6-3).