"La F1 tiene cosas que aprender de la Resistencia"
Fernando Alonso encarna a viva voz el pensamiento y el deseo de muchos pilotos:correr las 24 Horas de Le Mans. Por ser la carrera más mítica que hay, pero también por los superdeportivos que compiten, las, marcas oficiales, los circuitos llenos... y que pueden ir al cien por cien toda la carrera.
Su amigo Antonio García, en EE.UU. desde hace años, le habla siempre del discreto encanto de la Resistencia -carreras de seis, 12 ó 24 horas- especialidad al alza y que sigue seduciendo a pilotos de F1, muchos como último reducto de sus carreras, pero varios sedientos de la adrenalina que les falta en el Circo.
"La F1 ha ido perdiendo interés con el paso de los años en la última década, las audiencias han ido a menos y ha bajado por el formato, por la poca pelea en las posiciones delanteras y la desigualdad de los coches", asegura a MARCA Andy Soucek, que ha probado las dos recetas, una como probador de la escudería Virgin -hoy Manor- y ahora como piloto oficial de Bentley en las Blancpain Series donde compite en las Endurance y las Sprint y además en el Intercontinental GT Challenge.
"En Resistencia ha habido crecimiento de las marcas oficiales, que han apostado más por ese formato, como de los pilotos que se han ido quedando en el camino de la F1 o han venido de alli", dice el madrileño, que marcha tercero en la clasificación con claras opciones de título. "Esta especialidad ha dado con al tecla para el piloto, porque no es cara y es muy divertida. En Spa el otro día había 60.000 espectadores", afirma. "Además, las marcas de coches no se interesan por la F1, sólo quedan Renault, Ferrari y Mercedes, pero en los GT están Porsche, Ferrari, Aston Martin, Bentley, McLaren, BMW... todos venden deportivos en la calle y hay una competición por ver quién tiene el mejor superdeportivo del mercado", analiza Andy.
"Otro de los alicientes", cuenta Soucek "es que todos los coches son iguales, distintos de motorización en su colocación, motor delantero, central o trasero, pero gracias al BOP ('balance of perfomance') regulan el motor si es atmosférico o el turbo a principio de año y los ponen en una pista, los prueba un tío experimentado de Le Mans o F1, y la organización recoge sus datos y telemetría y establecen una igualdad, según sea el circuito, mediante un restrictor. Tienen tantos datos de análisis que clavan las prestaciones de un coche y otro. Casi cualquiera que sea bueno puede poner el coche delante, por lo que también se marca la diferencia en la puesta a punto".
Webber ya es campeón
Mundial de Resistencia (WEC), Blancpain GT Series, GT Open europeo, el Británico de GT, las Pirelli World Challenge en EE.UU, y en Asia el asiático de GT... multitud de campeonatos, todos ellos con coches igualados aunque sea por reglamento, bajo la especificación de GT3, excepto en el WEC, un pelín mas rápidos.
Allí viajó Mark Webber tras su periplo en F1 y ya cuenta con el título mundial FIA obtenido la pasada temporada como piloto oficial Porsche.No es el último en gozar:NicoHulkenberg ganó en Le Mans invitado en 2015.
"Sólo hay que ver los circuitos, el ruido, las carreras y la competición de la Resistencia, que en algunos momentos nos está pasando por la derecha", ha reconocido este año Fernando, hastiado, comoHamilton, de los continuos volantazos en el reglamento técnico y deportivo de la Fórmula 1.