Resumen | La Fiesta Olímpica fue en el Maracaná
ÚN | Ángel Arraez.- La matriarca octogenaria de la música brasileña en una fiesta funk de ágiles bailarines, la mayor selva amazónica del mundo en su descarnada lucha contra el asfalto, del brillo dorado de Gisele Bundchen al espíritu guerrero de las favelas: Rio inauguró sus Juegos cantándole al mundo que es diferente, que es mezcla, que es vida.
La ‘cidade maravilhosa’ se presentó desde el aire, con un vídeo que mostraba que los aros olímpicos han venido al lugar adecuado, una tierra que ama al deporte, al aire libre y a esa exuberante belleza suya que tantos han amado. “Yo sólo quiero ser feliz/ Andar tranquilamente/ en la favela en que nací y poder enorgullecerme/ y tener consciencia de que el pobre tiene su lugar”, cantó la famosa intérprete funk, que armó una fiesta llena de ágiles bailarines de hip hop, como las que cada fin de semana reúnen a miles de jóvenes de las periferias.
También se apuntó Elza Soares, la gran dama de la música nacional, que a sus 86 años entonó un tributo a las religiones afro-brasileñas, mezclado con los nuevos ritmos.
Mientras en la pista se escenificaba un enorme símbolo de la paz en verde y con un árbol dentro, una batucada con fuegos de artificio ensordeció a un Maracaná todavía a la expectativa, hasta que sonó su voz.
Brasil, ese gigante sin fin, hijo de la diversidad, de la batalla por la supervivencia, donde a la alegría y al dolor se le pone música se presentó a al mundo con la voz de Paulinho da Viola. El señor de la samba, pegado a su guitarra cantó ante miles de millones de espectadores, el himno nacional con la delicadeza y la intimidad de una canción de amor.
Pero desde hace meses este Brasil convulso no suena apacible, sacudido por la crisis y la incertidumbre. El Comité se ha cansado de repetir que la política quedaba fuera de los Juegos, aunque sea por esta noche, y el gigante sudamericano se dedicó a contar su historia, la del quinto país más grande del mundo, hogar de 206 millones de habitantes y de la mayor biodiversidad del planeta en su inmensa selva amazónica.
Música. Dos leyendas vivas de la canción brasileña, Caetano Veloso y Gilberto Gil y el estruendo de la samba de las escuelas de samba del Carnaval pusieron el colofón a la fiesta musical de inauguración de los Juegos Olímpicos.
Caetano y Gilberto, acompañados de la cantante Anitta, interpretaron uno de los mayores clásicos de la samba “Isso Aqui, o que É?”, justo después de los discursos, la inauguración de los Juegos y los juramentos de los atletas. A continuación, las doce escuelas de samba dieron rienda suelta al ritmo frenético de la percusión que caldea todos los años el Carnaval y que puso en pie al público e hizo bailar a algunas delegaciones de deportistas, en especial a la brasileña.
Mientras, cientos de bailarines disfrazados convirtieron el Maracaná en una suerte de “sambódromo”, aunque la famosa pasarela de la samba durante los Juegos ha sido convertida en la sede del tiro con arco y en la meta del maratón.
Venezuela. Casi al final de las delegaciones de los países participantes desfiló Venezuela. Al frente con la frente en alto y orgulloso de ser venezolano,
Campeón olímpico en Londres 2012 y representante de los atletas del país, desfiló el esgrimista Rubén Limardo Gascón, que iba acompañado por parte de la directiva del COV, el presidente Eduardo Álvarez, la secretaria Élida Párraga, y los atletas Silvio Fernández, Francisco Limardo, Erwin Caraballo, Gremlins Arvelo entre otros. Este viernes más temprano compitió en la disciplina de tiro con arco, el venezolano Elías Malavé. Ya corrió el telón de la fiesta, ahora comienzan los juegos. Y Venezuela tiene a 86 atletas que son garras y corazón.
Lamenta su ausencia. El tenista Roger Federer lamentó su ausencia en los Juegos Olímpicos de Río 2016 con un mensaje en las redes sociales en el que manifestó su deseo de ser uno de los integrantes del equipo suizo.
“Ojalá pudiera estar ahí”, escribió en su perfil de Twitter el exnúmero uno del mundo, quien siguió por televisión la ceremonia de inauguración celebrada este viernes en el estadio de Maracaná.
Federer renunció a participar en los Juegos de Río 2016 por un proceso de rehabilitación tras su operación de rodilla a principios de este año. El helvético no volverá a competir esta temporada.
Presidente del COI. El alemán Thomas Bach, llamó a la unidad en “un mundo en crisis” durante la ceremonia de inauguración de los Juegos. “Estamos viviendo en un mundo de crisis, desconfianza e incertidumbres”, dijo Bach, quien vive sus primeros Juegos como presidente.
Aquí está nuestra respuesta: los 10.000 atletas van a competir juntos, vivir juntos en la Villa Olímpica, compartiendo sus comidas y sus emociones. En este mundo olímpico hay una ley universal para todos. En este mundo olímpico, somos todos iguales”, añadió Bach delante de un estadio Maracaná entregado a su discurso.
Después del espectáculo, a cargo del famoso director Fernando Meirelles, creador de obras como ‘Ciudad de Dios’, y del desfile de los atletas, el presidente del Comité organizador, Carlos Nuzman, dio paso a su homólogo del COI antes de que el presidente interino de Brasil, Michel Temer, diera por inaugurados los Juegos bajo una atronadora silbatina.
Juramento. El regatista Robert Scheidt, el árbitro Martinho Nobre y la técnica Adriana Santos, tres reconocidos representantes del mundo deportivo brasileño, han pronunciado el juramento olímpico ante la bandera del COI. Los tres accedieron al escenario habilitado y efectuaron uno a uno el juramento tomando con la mano la bandera olímpica que momentos antes había sido izada. Scheidt, de 43 años, es uno de los más importantes deportistas en activo de Brasil, ya que ha ganado dos medallas de oro, dos medallas de plata y una de bronce en cinco Juegos Olímpicos.
Declarados abiertos. El cuestionado presidente interino de Brasil, Michel Temer, declaró oficialmente abiertos los Juegos Olímpicos, en medio de un fuerte abucheo. Temer sustituyó a Dilma Rousseff en mayo pasado, después de que la anterior presidenta fuera suspendida de sus funciones y apenas tiene un índice de aceptación del 13% en el país, azotado por una grave crisis económica y política. El presidente interino, en un segundo plano durante toda la noche, dio por inaugurados los Juegos en medio de una atronadora silbatina, que fue silenciada rápidamente por los fuegos artificiales.
Los espectadores habían festejado las palabras de Carlos Nuzman, presidente del Comité organizador, así como de su homólogo del COI, Thomas Bach, pero no mostraron clemencia con Temer, quien no fue presentado al principio como estaba previsto en el programa oficial.
Durante la jornada, miles de manifestantes salieron a las calles de Rio para mostrar su descontento con la organización de los Juegos Olímpicos y la gestión del propio Temer.
El pebetero. El exmaratonista brasileño Vanderlei Cordeiro, medalla de bronce en Atenas-2004, fue el encargado de encender el pebetero. Vanderlei, de 46 años, saltó a la fama en el maratón olímpico en la capital griega, donde cuando iba liderando fue atacado y retenido cerca del kilómetro 36 por un fanático, el ex sacerdote irlandés Cornelius Horan. El brasileño fue liberado por los espectadores y logró cruzar la meta en tercer lugar.
Premio especial. El keniano Kip Keino, doble campeón olímpico de atletismo en 1968 y 1972, ha sido galardonado durante la ceremonia con el Laurel Olímpico.
Es una nueva distinción creada por el COI para premiar a personas destacadas por su contribución a la cultura, la educación y la paz mediante el deporte.
El presidente del COI, el alemán Thomas Bach, hizo entrega del trofeo a Keino ante los 10.000 deportistas y 70.000 espectadores reunidos en Maracaná.
“Me siento extremadamente honrado”, dijo Keino, que invitó a los presentes a unirse a él en la promoción de la educación entre los jóvenes”.
Keino, actualmente presidente del comité olímpico de su país y miembro del COI, abrió tras su retirada del atletismo un hogar para niños en el que viven hoy más de 100 huérfanos.
También creó la Escuela Kip Keino, en la que reciben educación 300 niños que no tenían acceso a ningún centro de enseñanza.
Orgulloso. El tenista Rafael Nadal, abanderado de la delegación española que desfiló en la ceremonia mostró en las redes sociales su “orgullo” por representar a su país.
Acompañado por una foto levantando el puño, Nadal publicó, en castellano e inglés, este mensaje en Twitter: “Un orgullo poder representar a #España en #Rio2016!!”.
El manacorí ya fue designado abanderado de España en los Juegos de Londres-2012, pero tuvo que renunciar al no poder competir por una lesión.
A la cita olímpica llega ahora también sin competir desde mayo, cuando se retiró de Roland Garros por una lesión en la muñeca.
El martes admitió que si participa en Río es “porque son los Juegos” y que la oportunidad de ser el abanderado fue “un plus” para forzar, pese a no estar recuperado al 100%.
“Ya tuve que renunciar en Londres y hacerlo dos veces seguidas hubiese sido muy duro”, dijo.
Los refugiados. Los atletas que competirán en Rio-2016 bajo la bandera olímpica, por su condición de deportistas refugiados o independientes, se llevaron dos de las grandes ovaciones en la ceremonia. Poco después de iniciarse el desfile de atletas, al anunciarse la aparición del equipo de Atletas Olímpicos Independientes, el público que llenaba el mítico estadio rompió a aplaudir. Al final del desfile, precediendo a la delegación anfitriona, Brasil, entraron en el Maracaná los atletas refugiados que también compiten bajo bandera olímpica.
En Rio-2016 participarán ocho atletas como independientes, todos kuwaitíes, después de que el Comité Olímpico de ese país fuese sancionado porque su parlamento aprobó una ley del deporte que las principales organizaciones deportivas (como el COI o la FIFA) consideran como una injerencia política.
En total, son seis participantes en pruebas de tiro, uno en esgrima y otro en natación.
La decena de deportistas que participarán como refugiados proceden de Siria, Sudán del Sur, Etiopía y la República Democrática del Congo.
Atletas en la pista.
“Solo espero no caerme. Esa si sería una terrible pesadilla”
– La abanderada de Dinamarca, Caroline Wozniacki
“Bailando samba soy terrible, horrible. Y no lo voy a hacer”
– Andy Murray, abanderado de Gran Bretaña
“Me teñí mi pelo de verde y amarillo en honor a mi equipo. Mi amigo en Miami me lo hizo y le llevó unas tres horas”
– La velocista estrella jamaiquina Shelly-Ann Fraser-Pryce
“Estaré orgullosa y no estaré nerviosa. Ahora es el momento de pensar en el deporte”
– Rose Nathike Lokonyen, llevando la bandera del equipo de refugiados
“Creo que a nadie se le ha caído la bandera (en una ceremonia inaugural) y no quiero ser el primero”
– El abanderado irlandés, Patrick Barnes
“Los dos últimos meses seguro que afectaron a los atletas. Fue una situación difícil. Estábamos preparados para lo peor, todo el equipo ruso pudo ser prohibido, pero hubo gente razonable que tomó la decisión correcta. Está claro que hay un problema de dopaje, pero los atletas limpios no deberían sufrirlo”
– El abanderado ruso, el jugador de voleibol Sergei Tetyukhin
“Estoy muy nervioso porque me sudan las manos. Tengo tendencia a ser un poco torpe pero me aseguraré que nada pase esta vez”
– Abanderada australiana, la ciclista Anna Meares
“Es un momento muy especial, sobre todo para las generaciones mayores en Kosovo. Han sobrevivido guerras, ha pasado por tiempos muy difíciles y lo que está ocurriendo hoy ha sido un sueño por mucho tiempo para toda la gente en Kosovo”
– Majilinda Kelmendi, abanderada de Kosovo, país que disputa sus primeros Juegos Olímpicos. AFP/EFE/REUTERS