Landa: "El equipo que me quiera será por lo que puedo hacer"
-¿Ha visto repetida la caída que truncó sus aspiraciones en la general?
-Sí… unas 15 veces. La moto del policía no tenía que estar aparcada ahí, en una zona a full-gas, cuando los equipos cogían posiciones para afrontar la subida al Blockhaus. Tampoco podemos irnos de rositas nosotros: a veces queremos pasar por donde no cabemos, no se respeta, y así se producen muchísimos incidentes.
-¿Pensó en la retirada?
-No, aunque nada más levantarme del suelo creí que me había roto la pierna izquierda por el dolor tan fuerte en el vasto externo. Ese día ascendí con la derecha, apenas era capaz de dar pedales. Cuando comprobé que iba fatal me tiré en una mediana, desesperado. Al menos las exploraciones descartaron lesiones óseas y musculares, y espero encontrarme mejor para la tercera semana.
-¿Cómo afronta ahora la carrera?
-En los Apeninos ya anduve con la fuga, traté de exigirme y de probarme un poco. No me noté pletórico, como Fraile, pero sí que recupero sensaciones poco a poco. Deseo ser agresivo en la tercera semana, pasar al ataque y buscar una victoria. O varias. Incluso la maglia de escalador. Lo que se tercie (risas).
-¿Los ánimos en el Sky?
-Tocados. No obstante, confiamos en voltear la situación. Pretendemos cazar algo bueno antes de llegar a Milán.
-Desde su irrupción el Giro de 2015 no ha confirmado las expectativas en 2016 ni en 2017.
-No me ha acompañado la fortuna dos años. En 2016 me mandó para casa una enfermedad. En esta ocasión, la clasificación se ha truncado por un percance. Sin embargo, el ciclismo funciona así. La caída rompió todos mis planes. Me veía francamente bien, para disputar la general con los mejores.
-Se quedará con la duda de qué habría sucedido.
-Sí, aunque pienso que podría haber estado con Nairo en el Blockhaus.
-Acaba contrato con el Sky el 31 de diciembre. ¿Afectará en su caché perder esta oportunidad en el Giro?
-No lo sé. Aún estoy a tiempo de remontar el vuelo en los Dolomitas y los Alpes. Si ahí consigo un par de triunfos, se dejarán atrás los malos momentos. Con 27 años, el que quiera ficharme, o si renuevo, será más por lo que puedo hacer que por lo que hecho. Y puedo dar mucho.