Russell Westbrook ya es leyenda: 2º en la historia en promediar un triple-doble
A Russell Westbrook le quedan tres partidos para poner punto final a la Temporada Regular y, haga lo que haga, acabará con una media de triple-doble: promediará dobles figuras en puntos, rebotes y asistencias. Si el base de Oklahoma City Thunder se queda a cero en esos tres apartados estadísticos en los dos encuentros contra Denver y el de Minnesota, sus números lucirán con 30,5 tantos, 10,2 capturas y 10,0 pases de canastas. Un hecho histórico que completó esta madrugada en Arizona ante unos Suns que dieron un auténtico repaso a OKC (120-99) desde el primer cuarto con Devin Booker en modo asesino (37 puntos con un 5/9 en triples).
Han tenido que pasar 55 años para ver de nuevo algo tan salvaje. El primero y último hasta la fecha en llegar a esa cima fue Oscar Robertson. El jugador de Cincinnati Royals terminó la temporada 1961-62 con 30,8 puntos, 12,5 rebotes y 11,4 asistencias. Y ahí reside la grandeza de lo conquistado por Westbrook en una campaña que comenzó con el incendio provocado por la salida de Kevin Durant a Golden State Warriors. 55 años y nadie había tosido el hito de uno de los colosos en la historia de la Liga norteamericana. Ni Magic Johnson ni Michael Jordan ni Larry Bird ni Kobe Bryant ni LeBron James. Era un imposible matemático que Westbrook se empeñó en derrumbar cuando todos decían que era simplemente un sueño. Una rabieta con la que quería demostrar a todos que él era alguien más allá de la sombra de Durant. Ahora, el mundo está a sus pies a la espera de que complete el más difícil todavía: superar los 41 triples-dobles del propio Robertson.
Y pudo hacerlo en Phoenix. No tenía problemas. Es su trabajo habitual. Pero se quedó a dos asistencias (23+12+8). Ya fuera por la brutal paliza que estaba recibiendo o por su deseo de vivirlo con su público, el dos veces MVP del All Star Game no quiso batir el récord y cuando restaban aún 2:34 para acabar el duelo, se sentó en el banquillo, entre los gritos de ánimo de los aficionados de los Suns que querían presenciar algo mágico. Habrá que esperar, aunque ya son dos balas malgastadas.
RELACIONADO | MVP, defensor, rookie,ejecutivo... ¿Quién se llevará cada premio?
Lo que está claro es que el día no era de los Thunder. Ni el de Westbrook en el lanzamiento. Cerró su peor partido de la temporada en el tiro con un 6/25 (24%). Es el cuarto peor porcentaje de su carrera con 20 o más tiros y los Suns se aprovecharon para darse una pequeña alegría en una campaña que finalizó hace mucho, mucho tiempo. Son el peor equipo de la Conferencia Oeste, el segundo de la NBA, y su único objetivo es un draft en el que con toda seguridad elegirán en el Top-3. Una perla está de camino a Arizona para hacer pareja con Booker. El próximo curso puede ser algo más para una franquicia perdida entre las tinieblas de la mediocridad.
Sin Westbrook a tono, el primer cuarto ya decidió el duelo. El parcial 32-19 con el que se cerraron los primeros 12 minutos solo fueron el prolegómeno de una batalla sin rival a la vista. Los Suns fueron descerrajando manotazos frente a unos Thunder que solo querían salir de ahí. Demasiado agarrotados y espesos, su ataque chocaba contra una intensidad bastante sorprendente por parte de los chicos de Earl Watson. Del 32-19 se pasó al 71-48 del descanso y no hubo respuesta de Oklahoma que rindió el fuerte con la imagen de Westbrook sentándose en el banquillo. Habrá mejores días para superar a Robertson.